Vamos a iniciar este recorrido con una reflexión que realiza Isabelino Siede sobre la pregunta acerca de por qué enseñar Ciencias Sociales, cuestión que vamos a remachar planteándonos por qué enseñar Historia, y subimos la apuesta a cómo enseñarla. Nos dice Siede “Es una interpelación necesaria a la hora de revisar las propias prácticas, y al momento de evaluar si tiene sentido el currículum que habita actualmente nuestras escuelas. Allí se amontonan prescripciones curriculares de otras épocas, tradiciones de enseñanza que, a veces, se mantienen por inercia, valoraciones heredadas sin demasiada crítica de una generación a otra. Se trata de una pregunta indispensable para orientar las transformaciones curriculares y didácticas que nos planteemos a nivel colectivo, al mismo tiempo que configura un buen ejercicio al inicio de cada año y de cada unidad temática: ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Cuál es el sentido de la enseñanza que nos proponemos realizar?” (Siede Isabelino Coordinador, s.f., p. 10) Y junto a todas estas preguntas, en este escrito le vamos a sumar también otra tensión: ¿cómo aprendemos a enseñar?